Identidad digital: por qué es importante y cómo cuidarla
En la actualidad, la navegación en la red para trabajar, estudiar, realizar trámites, comprar o contratar servicios ha hecho que sea más urgente la necesidad de crear entornos seguros para los usuarios, de manera que sus datos personales, financieros y cualquier tipo de información sensible esté a salvo mientras realizan sus actividades en las plataformas digitales.
De acuerdo con datos de la Asociación de Internet MX, durante el 2020, y como consecuencia del confinamiento por el covid-19, la cantidad de personas que hicieron uso de internet registró el mayor crecimiento comparado con los 5 años previos, un comportamiento impulsado por la demanda de conectividad ante necesidades del trabajo remoto y clases a distancia, así como búsqueda de entretenimiento en casa.
Con el desarrollo de herramientas tecnológicas, una de las formas más seguras de navegación en los entornos en línea es la creación de identidades digitales, ya que minimiza riesgos por suplantación y gracias a que es aplicable a diversos tipos de industrias, negocios o actividades, brinda seguridad y confiabilidad en la validación de la identidad virtual de clientes, colaboradores y ciudadanos.
¿Qué es la identidad digital?
Se entiende por identidad digital al conjunto de información disponible en línea que sirve como evidencia o representación de la existencia real de una persona física. De forma que es también una manera de identificar a una persona para darle acceso a diversas plataformas o servicios en línea, mediante las que es posible realizar cualquier tipo de actividades, transacciones u operaciones.
En algunos países, la identidad digital tiene reconocimiento legal. De acuerdo con el Banco Mundial, quien tiene en marcha la Iniciativa Identificación para el Desarrollo (ID4D), los sistemas de identidad digital permiten la autenticación automatizada y remota de las personas para acceder a servicios y prestaciones, tanto en forma presencial como en línea. De manera que representan un sistema de inclusión, ya que están basados en el derecho de toda persona a participar plenamente en la sociedad y en la economía.
¿En qué consiste la identidad digital?
La identidad digital de las personas se realiza mediante la integración, en un sistema informático que permite la captura, procesamiento y almacenamiento de la información, de la:
- a) Identidad biográfica o atributos adquiridos a través del tiempo como las identificaciones oficiales INE/IFE, pasaporte, documentos académicos o Curriculum Vitae, entre otros.
- b) Identidad atribuida o atributos adquiridos en el nacimiento, como por ejemplo, nombre, lugar de nacimiento, fecha de nacimiento.
- c) Identidad biométrica, que es el conjunto de características físicas que la hacen única a una persona, como el iris, las huellas dactilares, la voz, el rostro, entre otros elementos.
El procesamiento de todos los elementos en un sistema de tecnología biométrica es utilizado posteriormente para validar la identidad de los usuarios de una forma segura y confiable, a diferencia de las contraseñas o claves que tienen un gran margen de ser vulneradas.
¿Para qué sirve la identidad digital?
La identidad digital permite a las empresas, instituciones o gobiernos contar con un esquema seguro para el acceso de usuarios, clientes, beneficiarios o ciudadanos que realizan trámites o actividades disponibles en sus plataformas en línea. De manera que no sólo restringen el acceso de la información privilegiada a personas no autorizadas, sino que permiten rastrear a quien llegara a hacer mal uso de ésta.
Dicho de otro modo, las instituciones, apoyadas en tecnología de identificación biométrica, pueden contar con mayores niveles de seguridad y ofrecer confianza para acceder a plataformas educativas o laborales; hacer transacciones bancarias en sitios de entidades financieras, realizar compras, acreditarse como beneficiario de algún programa social o hacer válido algún seguro, entre otras actividades.
Características de la identidad digital
La principal característica de la identidad virtual de una persona, resguardada en un sistema biométrico, es que cuenta con un elevado nivel de seguridad, debido a que es intransferible, ya que únicamente la persona que posee los rasgos físicos vinculados a su nombre tiene acceso a su información.
Por otro lado, su utilización es cada vez más accesible. Esto la convierte en tecnología flexible para diferentes aplicaciones, independientemente de la industria o sector y del tamaño de la empresa o institución que requiera utilizarlo, debido a que puede ser adquirida por todo tipo de empresas con inversiones adecuadas a sus posibilidades y a un costo accesible.
Ventajas de la identidad digital
Son altamente resistentes a fraudes, debido a que la información es cifrada desde que se toma la captura por primera y se requeriría de un equipo de cómputo de alta potencia y algunas décadas para ser interpretada. Además, cualquier persona que solicite información de esa base de datos o quiera modificarla deberá estar autorizada con un acceso biométrico, el cual no pueden ser vulnerados como las claves o contraseñas que pueden ser robadas u obtenidas mediante espionaje.
Los sistemas biométricos tienen la gran ventaja de tener un costo mínimo de mantenimiento y están respaldados en soluciones amigables que mejoran la experiencia del usuario a la hora de registrarse o autenticarse.
Además, son personalizables de acuerdo con las necesidades de cada empresa o institución, de manera que puede ser multibiométrico, es decir, incluir varias biometrías, o agregar documentos adicionales para la creación de expedientes digitales.
Resguardo de identidad digital
Ahora que conoces qué es, cómo se forma tu identidad digital, los usos que tiene y las ventajas de su implementación, es importante saber cuál es la importancia de cuidarla y cómo puedes proteger tu información personal a la hora de usar diversas plataformas en las que proporcionas datos.
Las contraseñas, nombre o fechas de nacimiento, entre otros datos que proporcionamos de forma usual al ingresar a algunos sistemas en línea, son información vulnerable de ser extraída, por lo que la biometría o el uso de una identidad digital robusta que incluye huella digital u otra información biométrica permite crear formas más eficaces de fortalecer la seguridad de los datos.
De forma personal, existen diversas medidas de ciberseguridad que es posible implementar para proteger nuestra identidad en internet, como el uso responsable las redes sociales, evitar la descarga de programas dudosos, no proporcionar datos en plataformas no seguras, utilizar antivirus y usar redes seguras para conexiones cuando está de por medio el uso de datos personales o información sensible.
Los juegos o aplicaciones en línea en los que se hace uso de fotografías del rostro es sólo un ejemplo de las múltiples acciones innecesarias en los que se proporciona información personal, por lo que la recomendación, como medida para proteger la identidad digital, es no compartir o publicar a la ligera información personal o cualquier tipo de datos a los que se les puede dar mal uso.