Hoy, las pequeñas y medianas empresas (Pymes) tienen a su alcance herramientas tecnológicas para incrementar su eficiencia y resolver sus áreas de oportunidad sin necesidad de desembolsar una inversión fuerte. Las redes sociales, por ejemplo, son un escaparate ideal para exhibir sus productos, resolver dudas, establecer conversaciones y hasta abrir una tienda en línea.

Los cambios en el estilo de vida que trajo consigo la contingencia sanitaria contribuyeron, en parte, a traer grandes oportunidades para las Pymes, sobre todo las que tienen modelos de negocio en línea, y abrió la posibilidad de que muchas que no dependían de cadenas de producción internacionales encontrarán su lugar en el comercio local.

Tiendas de ropa, accesorios, productos de limpieza, higiene personal, consumo, todo tipo de servicios, clases en línea, entre otros rubros, florecieron por las condiciones y las restricciones propias de la pandemia. Las personas que alcanzaron a capitalizar esta ola se vieron beneficiadas con un gran público al que lograron cautivar con calidad y servicio, y que ahora son clientes frecuentes.

Sin embargo, además del crecimiento que disfrutan dichas Pymes, también se enfrentan a riesgos y problemas de seguridad con los que no estaban familiarizados, por lo que es necesario que implementen sistemas tecnológicos en beneficio de sus operaciones y de sus clientes.

Cuidado con los fraudes

El crecimiento de tu negocio implica abrirse a nuevos mercados y, por ende, a potenciales consumidores de tu producto o servicio. Aunque esta es la misión de cualquier compañía y la conquista de un nuevo mercado siempre es una señal positiva, debemos estar conscientes que no todas las personas que se aproximen a tu negocio lo harán con las mejores intenciones.

Uno de los principales problemas a los que se enfrentan tanto Pymes como consumidores es a los fraudes cibernéticos. Ya sea a través de cuentas falsas, robo de identidad, ingeniería social, remitentes sospechosos y otras de posibilidades, los intentos de fraude se encuentran presentes en todas partes.

De acuerdo con la Condusef, compartir datos personales por email es uno de los principales riesgos. Por ello, se debe implementar una política integral de protección de datos que implique el uso de herramientas tecnológicas y una concientización por parte del personal sobre los riesgos.

Biométricos

No todas las empresas pequeñas y medianas operan en línea e incluso las que son completamente digitales puede que cuenten con una oficina o algún espacio físico. En cualquier caso, es recomendable que, desde las etapas más tempranas de tu negocio, implementen un sistema de reconocimiento biométrico como medida de seguridad.

La biometría te permitirá llevar un registro detallado del personal en el centro de trabajo, además de brindarte la información necesaria para monitorear todo tipo de actividad. Algunas veces, los fraudes se cometen por empleados de la propia empresa, y los sistemas biométricos ayudan a restringir el acceso a zonas e información vulnerable.

Pero también pueden ser vitales para mejorar la experiencia de tu clientes, ya que a través de una autenticación biométrica se puede garantizar la validación de una compra y su respectiva entrega, o incluso puedes promover programas de lealtad y ofertas personalizadas.

Accesos

Un mayor volumen de operación generalmente implica más personal y a medida que incorpores más colaboradores a tu empresa, más personas tendrán acceso a datos sensibles. Por ello es importante que realices monitoreos permanentes para retirar los permisos y accesos de empleados que hayan concluido su relación laboral.

Correos, contraseñas de acceso a portales, códigos, claves y demás instrumentos de ingreso para el trabajo deben de compartirse entre colaboradores activos según la pertinencia. Además, es una práctica administrativa que te permitirá facilitar la operación de las actividades al interior de la organización.

Respalda tu información

Siempre es recomendable conservar un respaldo de toda la información que se produzca sobre la empresa en un dispositivo de almacenamiento que se encuentre seguro. Los ataques de hackers y piratas cibernéticos son una realidad y siempre buscarán los blancos fáciles, es decir, aquellas empresas que creen que no son atractivas para estos delincuentes y que tienen sistemas de seguridad muy endebles.

También es recomendable respaldar este tipo de datos en un servidor alterno. Hoy en día, las nubes públicas pueden ser una excelente opción para resguardar esta información, siempre y cuando se establezcan candados adecuados para poder acceder.

Un sistema de seguridad óptimo depende de muchos factores: el giro de la empresa, el volumen de las operaciones, el valor del producto o servicio, la ubicación del centro de operaciones, la cantidad de empleados, entre otros elementos. Para conocer la opción ideal para tu negocio te recomendamos acercarte a los expertos de Biometría Aplicada.