Crea programas de lealtad con la ayuda de los sistemas biométricos.

Crea programas de lealtad con la ayuda de los sistemas biométricos

Uno de los usos más comunes de los sistemas biométricos en la actualidad es la identificación de personas con fines de seguridad dentro de los procesos de servicios financieros o gubernamentales, así como en lo relacionado a salidas y entradas en fronteras internacionales. Sin embargo, la biometría tiene un alto potencial en otros sectores que aún no han sido del todo explorados, como es el caso del retail.

Dentro de las aplicaciones qué podría tener la biometría en las ventas minoristas está la de sumar elementos para construir una buena experiencia de compra para sus clientes. Esto es determinante dentro de una industria con tan alta competencia, porque es en los pequeños detalles que el consumidor basa su decisión de regresar o no.

Es por ello que uno de los grandes desafíos del sector es mejorar cada día para responder oportunamente a las demandas de los nuevos compradores, quienes actualmente están más enfocados no sólo en qué se les vende y a qué precio, sino cómo es el proceso de venta, incluso lo que sucede después de haberse concretado la adquisición de un producto determinado.

Poner el foco en los clientes leales

El economista estadounidense Philip Kotler, considerado el padre del marketing moderno, propuso una regla conocida como el binomio 20-80, que establece que sólo el 20 por ciento de los consumidores de algún negocio son quienes generan el 80 por ciento del total de ventas. En esto radica la importancia de conservar a los clientes ya cautivos.

Las soluciones que ofrece la biometría, en ese sentido, hace vislumbrar un gran abanico de posibilidades en torno a crear programas de fidelización que permitan conservar la preferencia de los compradores fieles, mediante una atención cada vez más personalizada y programas de beneficios realmente pensados en cada persona.

Experiencias ágiles de compra

Actualmente, las formas más comunes de identificar a los clientes registrados o que cuentan con determinada membresía es mediante el uso de tarjetas o códigos. Sin embargo, es común que este tipo de identificaciones se compartan entre los miembros de una misma familia, lo que minimiza la posibilidad de personalización y de crear historiales basados en hábitos y preferencias individuales.

Cambiar estos sistemas de identificación por aquellos basados en el uso de datos biométricos, mediante lectura del rostro por ejemplo, generaría un proceso más sencillo y ágil al momento de la compra, en comparación con los métodos tradicionales donde podrían llegar a olvidar su número de cliente, código personal, o incluso perder su tarjeta de lealtad.

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Conocer al cliente lo mejor posible

Los programas de lealtad exitosos están basados en conocer los gustos, preferencias y necesidades de los consumidores para poder anticipar sus deseos y ofrecerles soluciones oportunas y personalizadas.

Por ello, realizar estudios sobre hábitos de compra, incluso con objetivos estadísticos, permite generar programas de lealtad mucho más acertados y eficaces para hacer sentir a los clientes realmente reconocidos, no sólo en puntos de venta físicos, sino también en canales digitales, donde cada vez se tienen más avances en el proceso de personalización de experiencias.

Mejorar sus expectativas 

Cuando los sistemas biométricos sean capaces de medir los hábitos de consumo y preferencias de cada persona en específico, será más sencillo ofrecer programas de beneficios basados en sus gustos personales, de acuerdo con su edad o incluso alineados con las marcas de su preferencia.

Si bien estos alcances aún son una posibilidad, dejan vislumbrar amplias posibilidades de personalización en promociones y recompensas, sobre todo porque ya existe la tecnología adecuada para ayudar a los negocios con este propósito.

Retos de la tecnología biométrica

Es importante considerar que para que este tipo de tecnología biométrica tenga un uso más generalizado, es importante seguir venciendo los retos que aún existen en la industria:

  1. Generalización del uso de biométricos. Al ser una tecnología cuya implementación ha ido avanzado muy rápido en los últimos años, se han generado una serie de mitos sobre su uso y quizá pueda haber algunos consumidores que se muestren reticentes de proporcionar sus datos biométricos. Sin embargo, en la medida que los negocios muestren su compromiso de resguardar la información conforme a parámetros internacionales y restrinjan su uso solamente para el objetivo que se recabaron, más personas confiarán en sus beneficios.
  2. Conocimiento de los marcos legales existentes. La recolección de información biométrica de los usuarios tiene implicaciones legales, puesto que se trata de información personal que puede convertirse en sensible, dependiendo del objetivo de su uso. Sin embargo, no existe una restricción legal para que el sector retail implemente la tecnología en sus tiendas, por lo que, para evitar incurrir en alguna falta, se recomienda acercarse a empresas especializadas que pueden bridar tanto asesoría legal como técnica.
  3. Garantizar la seguridad de los datos. Con base en las leyes actuales, el proceso para solicitar datos biométricos de los clientes requiere de su autorización y hacer de su conocimiento el uso que se hará de sus datos, pero sobre todo garantizar su almacenamiento seguro, mediante tecnología de vanguardia que no sea vulnerada con fines delictivos.

Si tienes dudas sobre el uso de tecnología biométrica y las soluciones actualmente disponibles en el mercado mexicano, te invitamos a ponerte en contacto con los especialistas de Biometría Aplicada, quienes podrán orientarte sobre las posibilidades que existen para cada industria y sus diversas aplicaciones.