El uso de datos biométricos en México es una realidad presente en nuestro día a día, debido a que cada vez son más las instituciones públicas y privadas que han implementado soluciones biométricas para mejorar la experiencia de ciudadanos y clientes, sin poner en riesgo la seguridad de su información.
¿Cómo funciona la tecnología biométrica?
En estos tiempos, seguramente te has encontrado ya más de una vez con aplicaciones de bancos o de gobierno que te piden proporcionar, además de tus datos biográficos, una captura de tus huellas digitales, de tu rostro o incluso grabar un audio o video. Estas medias se han implementado con el objetivo de autenticar tu identidad mediante datos biométricos y prevenir que alguien que no seas tú esté realizando transacciones o trámites en tu nombre.
La tecnología basada en la identificación de las personas mediante sus rasgos físicos y de comportamiento únicos como las huellas dactilares, el iris, el rostro o la voz, entre otros, representa actualmente la forma más segura de permitir accesos a plataformas bancarias o de solicitud de trámites, por lo que se ha convertido en una alternativa de seguridad para instituciones públicas y privadas, con implementaciones tan diversas como los accesos físicos y control de presencia en los trabajos o autenticación fiable de ciudadanos en fronteras.
¿Qué documentos oficiales contienen datos biométricos?
Es México, uno de los avances más significativos en la materia es la digitalización de documentos oficiales, lo que ha permitido robustecer sus medidas de seguridad para evitar su falsificación. Algunos ejemplos son_
El pasaporte electrónico
Desde octubre de 2021 inició la expedición de la nueva versión de este documento, cuya principal característica es que incluye un chip que almacena de forma electrónica los datos biográficos y biométricos -rostro y huellas dactilares- de los viajeros.
Con la implementación de este tipo de tecnología, el documento es el más seguro y confiable del país e incluso está avalado por sistemas internacionales, por lo que dificulta la suplantación de identidad de los ciudadanos ya que es muy difícil de falsificar o alterar. Por otro lado, sus elementos de seguridad agilizan el acceso de las personas en los puestos de revisión para favorecer la movilidad de los mexicanos en todo el mundo.
Credencial para votar
Aunque tradicionalmente la credencial de elector ha mostrado una fotografía del rostro, el modelo más reciente tiene un código QR que contiene la imagen de la huella digital y que puede ser consultado de forma segura en la aplicación del Instituto Nacional Electoral (INE) para comprobar la autenticidad del documento.
Es importante destacar que aunque la base de datos del INE o padrón electoral contiene la información biométrica de todas las huellas dactilares de los ciudadanos, junto con su información biográfica, CURP y clave de elector, el organismo sólo avala que la persona que presenta el documento es quien dice ser, más no complementa o proporciona información a las instituciones públicas y privadas que solicitan la autenticación.
Licencia de conducir
Este documento es una de las identificaciones oficiales aceptadas para la realización de trámites y por eso es importante también garantizar su autenticidad. En ese sentido, la mayoría de las licencias de conducir emitidas en los estados de la República cuentan con una fotografía del conductor y huellas dactilares en su base de datos.
En el caso de la Ciudad de México, la base de datos de la Secretaría de Movilidad (Semovi) cuenta con información biométrica de los conductores, mientras que las licencias impresas o digitales tienen un código QR que es utilizado para verificar la autenticidad del documento al cotejarlo con la base de datos de la dependencia y así evitar suplantaciones.
Cédula de identidad digital
En 2020, la Cámara de Diputados aprobó la nueva Ley General de Población, que incluye la expedición de la Cédula de Identidad Digital, la cual contendrá los datos personales de los ciudadanos, pero también sus biométricos. Eventualmente, este documento funcionaría como identificación oficial, física y digital, para realizar diversos trámites gubernamentales.
Sin embargo, antes de que la creación de esta nueva base de datos fuera aprobada por la Cámara de Senadores, el hecho de que la información recabada por la Secretaría de Gobernación ahora incluyera datos biométricos despertó una serie de temores sobre el tratamiento de la información de los ciudadanos y la posibilidad de que la base sea vulnerada.
Mayor seguridad con biométricos
Mientras la mayoría de las objeciones a la implementación de tecnología biométrica están basadas en desconocimiento y mitos sobre cómo funciona, lo que sí es una realidad es que la Comisión Nacional para la Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) recibe cientos de quejas mensualmente sobre delitos relacionados con el robo de identidad para realizar actos delictivos.
Ante ello, la tecnología biométrica representa la alternativa más segura para cotejar los datos de una persona con la base de datos de una institución, y por ello es tan importante que los documentos oficiales utilizados para la identificación de las personas cuenten con los más altos estándares de seguridad y que permitan validar de la manera más confiable que una persona es realmente quien dice ser.
Y además es importante recordar que para la gestión de identidades digitales es vital contar con la infraestructura más avanzada, para garantizar un almacenamiento seguro de la información de los ciudadanos. Esto sólo pueden proveerlo empresas especializadas y con una amplia experiencia en soluciones biométricas, que pueden orientar sobre las soluciones más avanzadas que existen actualmente en el mercado.
Biometría Aplicada es una empresa mexicana líder en la implementación de tecnología biométrica para la creación de identidades digitales, lo que permite incrementar la productividad de las instituciones a través de la eficiencia operativa y la trazabilidad de sus procesos. Acércate a nosotros si quieres conocer las soluciones que podrían contribuir a tu empresa.